jueves, 19 de mayo de 2011

Capítulo 13: “Monjas?!”

Me levanté para ir al colegio, me cambié y bajé a desayunar sin decir una palabra. A Victoria le hablaba, porque ella no tenía nada que ver.
Comí rapidísimo y me fui casi trotando hasta la puerta, pero un brazo detrás mío me detuvo. Era mi papá, que no me dejaba salir de mi casa.
-Cambio de planes. Hoy no vas al colegio.
-Qué? Por qué?- lo miré conteniendo la bronca.
-Ya hablamos con tu mamá sobre lo que pasó, y te vamos a cambiar de colegio.
-CÓMO?!
-Vas a ir al católico. Empezás mañana.
-ME VAN A ENCERRAR EN UN CONVENTO CON MONJAS SOLAMENTE PORQUE TENGO NOVIO?!
-Te vamos a mandar a ese colegio para que te eduquen.
-Ya estoy educada. Y si ahora las cosas van a ser así pido que me enmancipen.
-Tenemos que autorizar eso, y no lo vamos a hacer.
-Bueno, pero a mi no me ven más. Prefiero vivir en la calle que acá.- Abrí la puerta y salí corriendo a la casa de Juanba.
Toqué la puerta y casi no podía respirar. Me atendió su mamá y me dio un vaso de agua. Me hizo pasar a la casa y me senté a esperarlo en el living.
No daba más de la desesperación, y cuando bajó mi primer reflejo fue correr a abrazarlo. Derramé unas lágrimas, y él me abrazó más fuerte.
-Qué pasó? No llores, va a estar todo bien.
-Me fui de mi casa Juan..
-Y ahora qué vas a hacer?
-No sé, acabo de venir de ahí.
-Acá te podés quedar, supongo.. en el cuarto de mi hermana.
-Acá? Y tu mamá qué dice?
-Va a entender, mi amor.. Ella sabe todo lo que pasó.
-Estás seguro?
-Casi.- Me abrazó otra vez y llamó a su mamá.
-Ma, Flor se fue de su casa..
-Estás bien, Flor?- me miró con cara de madre preocupada.
-Sí, gracias..- yo apenas podía respirar.
-Se puede quedar acá? En el cuarto de Caro.
-Sí, pero qué pasó con tus papás?
Le conté lo que había pasado, ella me ofreció un vaso de agua y fui al colegio con Juanba.

Tratamos de ir rápido para no encontrarnos con nadie en el camino. Estábamos por entrar cuando ví el auto de mi papá en la puerta. Salí corriendo hacia el parque de atrás para que no me viera, y me choqué con Victoria.
-Dónde estabas? No sabés como está mamá!
-Shh.. callate Viqui necesito que no les digas nada. Yo estoy bien.
-Dónde te fuiste?
-A lo de Juanba.
-Bueno, yo no digo nada pero prometeme que te cuidás en TODOS los sentidos.
-Bueno, pero andá porque si no se va a dar cuenta papá!
Ella se fue y yo seguí corriendo sin dejar de mirar hacia atrás. Cuando frené me di cuenta de que había un árbol, pero no tuve tiempo a reaccionar. Por suerte no me lo choqué, sólo me raspé los brazos al pasar cerca de unas ramas. Me senté atrás y sentí que algo vibraba en mi bolsillo. Era mi celular.
-Hola?
-Hola amor, donde estás?
-En el parque de atrás. Vos quedate adentro que cuando se vaya mi viejo yo voy para allá.
-Qué? Dónde está tu viejo?
-Estacionado en la puerta.
-Pero y si te ve?
-No me va a ver, estoy escondida.
-Tené cuidado, yo en el primer timbre si no venís salgo por la ventana.
-Ok, cuidate!
-Te amo.
Corté. El auto de mi papá seguía ahí. Yo temblaba, no quería que me encontrara.
Una hora pasó lento. Hacía frío y yo tenía que pensar cada movimiento que hacía.
Recibí un mensaje de Juanba: “Estoy atrás”.
Me di vuelta y lo ví, a unos diez metros del árbol, totalmente al descubierto.
Miré hacia delante y no pude evitar lo que iba a pasar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario